cuerpo contra luz,
verso contra cuerpo,
cuerpo y verso
a contraluz.
Si vas a marcharte,
deja las luces apagadas.
Entonces nos preguntamos
¿cómo dejar de sentir nada?
Arañamos la piel de los versos
para ver si aún nos queda
una pizca de alma.
Admitámoslo:
ahora, dentro, una, palabra, tras, otra,
trazo, coma, espacio,
una, vida, tras, otra,
nada,
si acaso la sensación
de acercarse y alejarse
como si el corazón fuera una pista de aterrizaje
donde nada permanece demasiado,
si acaso la sensación
de amar, de buscar,
de amar la búsqueda,
de odiar
amar
la búsqueda.
Admitámoslo:
Habitaremos entre dos mundos
sin pertenecer nunca a ninguno,
seremos, eternamente,
de ninguna parte
.
.