sábado, 17 de noviembre de 2012

Crónica de la humedad.




Huele a mojado en la calle.
Por el tubo de escape
 se cuelan algunas imágenes.

Tú 
siempre te fuiste demasiado pronto,
o yo
siempre llegué demasiado tarde.

Nunca tengo palabras para decir lo que necesito decir.
Nunca tengo palabras para escribir lo más importante.

(¿alguien puede bajar el volumen?)

La cuestión es que
sé cómo acabará todo.
Hablamos de una foto
fragmentada en mil partes.

(por favor, ¿alguien puede bajar el volumen?)

La cuestión, como decía,
es que lo acepto.
Supongo que hay que seguir creyendo,
palpando esqueletos de canciones,
conociendo a gente que nunca conoces,
amontonando versos quemados, susurros,
promesas de bar y cerveza,
aceptando llegar a lugares
donde nadie nos espera.

(¿alguien puede decirme dónde estoy?)

.

12 comentarios:

  1. Yo te voy a decir dónde estás: estás en una figura geométrica que se está haciendo luz al leer este poema que has escrito.

    Besos.

    ResponderEliminar
  2. Que canción es la que estaba sonando?

    ResponderEliminar
  3. Es un texto increíblemente rico. Un poema diez.
    Felicidades.

    Un abrazo y mil gracias.

    ResponderEliminar
  4. "promesas de bar y cerveza,
    aceptando llegar a lugares
    donde nadie nos espera."

    ¡Brindo por eso K! Y porque, estés donde estés, esa luz siga brillando en cada palabra, en cada silencio que separa dos palabras, dos cuerpos, dos almas...

    ¡Besos desde aquí!

    ResponderEliminar
  5. A veces los lugares donde nadie nos espera son los lugares en que encontramos a la mejor gente, siempre a las peores horas. Aunque allí no podemos llevarnos a quién quisiéramos...

    En fin. Si pienso en esto me dan ganas de darme a la cerveza jajaja.

    Abrazos.



    ResponderEliminar
  6. Es precioso, de verdad.
    Algún día querrás que suban más el volumen y sabrás de sobra dónde estás. :)

    ResponderEliminar
  7. Afrontarlo y dar un paso ciego. Puede que pases tiempo sin encontrar nada. Pero todos esos pasos que hay detrás no se van nunca. Sin embargo, a nosotros, aún nos queda el sueño.

    Le llaman madurar, crecer. Yo le llamo sobrevivir.

    Incluso a veces ViVimos.

    ResponderEliminar
  8. ¿Nos espera alguien en algún sitio? ¿Tenemos algo que aceptar?

    ResponderEliminar